viernes, septiembre 17, 2010

The Isosceles Project - Oblivion's Candle (2009)

Señoras y señores, estamos ante nada más y nada menos el mejor disco que haya parido 2009 de todos los discos que ha lanzado a lo largo de ese año, bajo mi humilde opinión. Nunca jamás me encontraré un disco de semejante envergadura como éste, de tal pasmosa ejecución, complejidad y progresismo. Esto es el elixir de la música, la panacea de todo mal (y paro que me desarrollo demasiado).

Siguiendo con mi intento de comentar los mejores discos del 2009 que publiqué en su momento en mi blog, The Isosceles Project pasa prácticamente de puntillas en la escena del Metal, en especial la canadiense, siendo originarios de Toronto. Este power trio formado por Eric Euler a la guitarra, Scott Tessier al bajo y Justin Falzoni a la batería (quien ha sido sustituido por Brandon Smith) muestra una densidad sonora y de una majestuosidad que ríete tú de cualquier banda del estilo. Lanzando un directo titulado Live At The Opera House, no tardarían en lanzar su disco debut Oblivion's Candle, bajo el sello Valkyre Records, y os aseguro que no os va a decepcionar, para nada.

Poca falta le hace a esta banda la presencia de voces, porque con sólo una guitarra, un bajo y una batería se bastan y se sobran para lograr una condensación musical única. 4 temas, 4 miserables temas cargados de continuos riffs, cambios de ritmos y composición compleja que van desde partes completamente cañeras a otras más relajadas. Imposible ser comparada esta gente con cualquier otra banda, lo que hacen este trío es tan sumamente enrevesado, que incluso pegándole mil escuchas, jamás lograrás exprimir el disco al 100%, siempre se te escapará algo o descubrirás otras cosa. Y eso es lo mejor del disco y de The Isosceles Project, ya que, más que escuchas, es como re-descubrirlos una y otra vez. Ninguno de los 3 componentes se queda en un segundo plano, todos tienen su propio protagonismo, la guitarra con su feeling, al igual que el bajo, que es quizás el que mejor se nota, con ese toque completamente jazzero que le da más dinamismo y presencia en el disco, y cómo no, la batería, con sus rimbombantes ritmos de continuo cambio y ejecución impecable.

No me atrevo a destripar el disco, es demasiado para mí. Sólo digo que fliparéis en toda su plenitud con sus 4 temas, Doppleganger, Oblivion's Candle, Solace (vaya pedazo de ritmos se marcan en este tema), y la no menos importante Whispers In The Factory. Todas tienen su deje que te atrapará y que no te soltará en todo el viaje hasta su final. Un auténtico cubo perfecto que da vueltas constantemente hasta noquearte.

Sin aún con esto no te convence, o no sabes lo que buscas o lo que quieres, o simplemente no estás preparado para descubrir esta gloria bendita traída de la Tierra. El mejor disco del 2009, así de sencillo, ¿qué te puede atraer más que eso?



Puntuación: 10/10

No hay comentarios:

Publicar un comentario