miércoles, mayo 04, 2011

Weekend Nachos - Worthless (2011)

Ésta es la primera vez que menciono un disco de Powerviolence, un género bastante ambiguo debido a su total controversia en cuanto a su significado. El Powerviolence era una definición que empezó a usarse para embarcar a algunas bandas que entraban dentro de unos parámetros similares, entre los que se encontraban su tono humorístico tanto en las letras como en sus temas, su característico Hardcore acelerado (en ese sentido, el Powerviolence podría ser al Hardcore lo mismo que el Speed Metal al Metal en general). Bandas como Spazz se veían englobadas en ella, y poco a poco se fue extendiendo su significado hacia algo más que algo puntual, enmarcándose muchas bandas que, de una manera u otra, bebían del Grindcore sin ser exactamente esto, manteniendo un cierto paralelismo con éste. Varias han sido las bandas que han ido surgiendo a raíz de este estilo, y en los últimos años han aparecido algunas como Hatred Surge y The Endless Blockade por poner ejemplos recientes.

Entre ellas, quizás la que mejor sabor de boca me haya dejado ha sido Weekend Nachos, provenientes de Chicago y que con su disco Unforgivable destilaban una fuerza y calidad colosal, mucho más potente que el de la mayoría de bandas del estilo y quizás sí más arraigado al Grindcore. Ahora, y sin previo aviso, vuelven a deleitarnos con su nuevo trabajo titulado Worthless, cargado una vez más de una brutalidad sonora pasmosa, donde las guitarras distorsionadas, titánicas y alocadas; los ritmos rápidos y los temas directos conforman un disco en donde la rabia y la mala hostia están aseguradas.

Aún a pesar de ello, podría decir que con Worthless, la banda ha querido dar un poco más de variedad al asunto, internando riffs acelerados con partes donde la expansión sonora se manifiesta a merced de ocupar todo el espacio que nos rodea, y donde las distorsiones y la saturación juegan un papel fundamental en ello, y que se puede presenciar en los temas más largos, como puede ser en el tema homónimo o Future, que derretirán tu cerebro en cuestión de segundos. Dicha transición entre temas cortos y rápidos - temas largos, lentos y más variados conforman un equilibrio estable que hará que no te caigas del disco en casi ningún momento y acabes deseando cortar el disco por lo sano. Ante todo, la voz de Snyder vuelve a ser acertada para una banda de esta índole: rabiosa, pero sin resultar monstruosa, más propia de un bulldog ladrando a unos desconocidos que la de una bestia proveniente de una remota caverna.

Así es el Powerviolence, así fue en sus comienzos y así es hoy en día: poder, destrucción. Puedes entenderlo o no, pero lo cierto es que nuestras palabras no cambien su forma de ser.



Puntuación: 9'25/10

1 comentario:

  1. Sin entrar a valorar qué es el powerviolence y si Weekend Nachos lo son (lo cual me importa un pepino), estamos ante una banda "terrorífica". Muy, muy buenos. Una de las mejores sorpresas últimamente. Espero que no tengan el porvenir que tuvieron Insect Warfare, otros animales de otro planeta que tan pronto nos dejaron.

    Saludos.

    Por cierto, muy buen blog, sigue con él!

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