Día 6 de Marzo, hora 20:30. La sala Paraninfo abre sus puertas. Me dirijo hacia ésta y presento mi entrada que llevaba encima desde hace semanas. Entro en la sala, y charlo con mi colega mientras hacemos tiempo. De repente, suben al escenario los teloneros de la banda que se presenta: El Niño Ruido.
Gran puesta en escena y entrega del vocalista hacia un público ciertamente reducido por aquel instante. Buenos riffs, guitarra espléndida y un gran bajo a manos de una chica. Sencillamente espléndido.
Terminan y bajan del escenario. Se realizan los preparativos para lo que todos esperábamos. Y entonces suben al escenario: Estirpe, y comienzan a dar rienda suelta de su poderío en escena, sobre todo por el vocalista Miguel Ángel, quien podría decir que es el Serj Tankian español: voz grandiosa, muy alocado y divertido, y haciendo con la voz lo que le da la gana. Sobre todo sonaron temas de su nuevo disco Buenos Días Voluntad. Temas como El Último Pétalo, Te Seguiré y Encender Otro Ángel sonaron esa noche. Tampoco se olvidaron de otros discos de su carrera como Ciencia. Muy entregados, haciendo subir al escenario a uno del público que empezó a llevar el ritmo junto con la banda. Increíble.
Muy buen sonido... hasta que hubo un fallo de éste en los micrófonos. El concierto se tuvo que parar un instante para arreglarlo a tiempo. Finalmente todo quedó en un susto. Quizás lo que sí me enojó es que casi al final del concierto, la organización del Paraninfo abriera sus puertas al público normal, lo cual hizo que pudieran ver los últimos minutos del grupo sin haber pagado la entrada correspondiente, entrada que servidor y muchos otros habíamos pagado. Mal hecho.
Por todo lo demás, esto fue el concierto de Estirpe en Gran Canaria, resumido en una sola palabra: Soberbio.
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