miércoles, mayo 11, 2011

Moving Mountains - Waves (2011)

Es curioso, pero últimamente están surgiendo nuevos trabajos de bandas a las que he dedicado como mínimo una entrada en mi blog. Septic Flesh, Altar Of Plagues y demás son un ejemplo de ello, los cuales han tenido más de un momento de gloria por estos lares (y con razones más que suficientes), y esta vez es el caso de una banda que ya había venido hablando de ella. Moving Mountains destacó en su momento por su propuesta dentro del mundo del Post-Rock, arraigado a los elementos del Indie y del Emo. Y aunque bien es cierto que el Post-Rock y el Indie Rock son dos elementos que siempre se han visto emparentados de una manera u otra, Moving Mountains conseguía un punto en el que se hacía bastante distinguible uno y otro, y que, con bastante recalco emotivo del Post-Hardcore por otro lado, obtenía un resultado más que satisfactorio y convincente.

Con la llegada de Waves, el balance que definía a Moving Mountains se ha distribuido hacia otro punto, en este caso hacia el punto del Indie, en donde el Post-Rock ya no es un punto crucial en este disco y se han basado en prestar mayor atención a los elementos que hacían de la banda interesantes, es decir, todo lo anteriormente dicho. Temas de menor metraje, en donde los esquemas del Indie Rock y los puntos del Post-Hardcore y el Emo (este último en menos dosis) se hacen más patentes. Esto no quiere decir que hayan renunciado al Post-Rock. Para nada, han decidido mantener los acordes y la presencia de éste que sigue latiendo en temas como el primer My Life Is Like A Chase Dream (And I'm Still Having Chase Dreams) o en The Cascade. Las melodías siguen siendo algo crucial en la banda como no iba a ser menos, en donde se podría decir que en este caso no han cambiado ni un ápice, voces dulces y melancólicas acompañadas en momentos puntuales de screams desesperantes pero que llegan a transmitir de igual manera. Aún a pesar de ello, podría decir que este cambio, sin quedar nada mal, supone un pequeño descenso en su puntuación respecto al desorbitante y majestuoso Pneuma, lo cual no quiere decir que Waves deje de ser un disco con una buena propuesta y un deseo por no querer estancarse en un mismo punto, pues en la guerra mantenerse siempre en un mismo sitio significa la muerte.

Puede alegrarte el día o desilusionarte, todo depende de con qué lupa lo observes. Desde luego no es una revolución ni un golpe de estado dentro de su propia música, pero sí que es un cambio en las coordenadas que tenían respecto a su debut, y que, a bien o a mal, hay que considerarlo.



Puntuación: 8'5/10

No hay comentarios:

Publicar un comentario