Amia Venera Landscape nace en Italia, y tras unos cuantos trabajos (algún EP y poca cosa más), lanzan su disco debut, The Long Procession, que es una patada en la boca a todos aquellos quienes aún dudan de la calidad que puede desprender un género como éste, pues no sólo de Post-Metal vive esta gente, sino que se aventuran en terrenos del Post-Hardcore y el Mathcore fusionados de tal manera que hacen de este disco algo que sólo podíamos soñar hasta ahora.
Nada más arrancar con Empire, nos damos cuenta de frente a qué nos estamos enfrentando. Comenzando con unas progresiones en la vena de Between The Buried And Me, la banda es capaz de desenvolverse en la técnica con total soltura merced a unos ritmos desorbitados y una voz simplemente aplastante. Pero tan pronto como parecen estar a punto de estallar entre tantos cambios de traste, de repente la banda para en seco y se aventura en los terrenos propios de unos Rosetta y Cult Of Luna, dos de sus principales influencias y que se puede notar claramente en este tema, terminando con unas piezas de teclado motivadoras a más no poder, y que continúa con A New Aurora para brindarnos uno de los mejores temas de Post-Metal jamás creados, así de rotundo. Comenzando a entrar en juego una voces melódicas aplastantes influenciadas en bandas como Underoath, este tema lo abarca todo: voces desgarradoras y cargadas de sentimiento, pasajes tranquilos pero contundentes y pesados a la misma vez, esas magníficas voces... lo tiene todo.
Y después de dejarnos sin aliento, pasamos a My Hands Will Burn Fist, en donde el sonido más potente de la banda se hace patente con unos riffs propios del Metalcore pero sin dejar la esencia Post-Metal de la banda, manteniendo las voces más puramente Rosetta y las voces armoniosas. Tras esto, las voces se suprimen completamente y pasamos a Ascending, monstruoso tema instrumental en donde las atmósferas producidas con sintetizadores y un triste piano conforman un tema desolador para nuestras almas y nuestros corazones, donde no hay cabida para la esperanza, y que dará paso a Glances, dividido en dos partes, la primera continuando la estela de Ascending, y una segunda donde vuelven a recuperarse las voces (atentos a las voces limpias, simplemente impresionantes en este tema).
Y entonces llegamos a EL TEMA, Marasm, casi 15 minutos de puro impacto y densidad sonora en donde la banda exprime y estudia con total pasmosidad todos los elementos del Post-Metal más embellecedor y melancólico jamás vivido, casi 15 minutos que te sabrán hasta a poco dado que te dejará con ganas de más. Pero es entonces cuando entra Nichòlas en acción, con una contundencia aplastante y donde, junto con The Traitors' March, se conjugan todos los puntos de vista de la banda, el alma de Rosetta, Cult Of Luna, Between The Buried And Me y Underoath y chocan todos a la vez en una supernova que solo deja tras de sí la más absoluta de las nadas, en donde ya nada importa, sólo haber disfrutado de una de las maravillas más gloriosas que nos haya dado la música en muchos años.
Tan hermoso, que darás gracias a la vida por existir en esta época y no en otra, una oda a la perfección, a la emoción y a la humanidad en general. Amia Venera Landscape es la banda, y me alegro de haber podido descubrir esta maravilla antes de que el año llegara a su fin.
Puntuación: 10/10 (Aunque tranquilamente podría ponerle un infinito)
Amén! discazo...es ponerme A New Aurora y me entran ganas de tocarme lascivamente jajaj Intenso, contundente, crudo...uno de los mejores discos de postmetal que he escuchado en muuuuucho tiempo. Brutal! :)
ResponderEliminarTe he visto alabar este disco en todas partes, me imagino que tendré que echarle una escucha al menos. Me lo bajo y mañana me lo pongo.
ResponderEliminarUn saludo.
No creo que te guste, Vinilín, pero por probar que no quede.
ResponderEliminarUn saludo a ti también.
Gran disco, más teniendo en cuenta que estamos ante un debut, y habla de un futuro tremendo para estos pavos. Eso sí, compararlo con el A Sun That Never Sets/Through Silver In Blood de Neurosis, Oceanic/Panopticon de Isis, el Lazarus Bird de Burst o el Somewhere Along The Highway de Cult Of Luna es tremendamente excesivo. Muchos de esos trabajos inventaron el género, otros lo llevaron a los más altos niveles de grandeza compositiva. Estos italianos tienen potencial, y mucho, para poder llegar a ese nivel (al de Isis o Neurosis no, porque son los padres de esto, y sólo por eso su trono está vetado), pero creo que es bueno, incluso para la propia banda, que tomemos cierta perspectiva al respecto.
ResponderEliminarPD: de acuerdo con Xabier, A New Aurora es tremenda!
Hombre, está claro que los fundadores del género están ahí, pero estoy bastante seguro de que este disco puede mirarlos a la cara fijamente sin ningún problema, tanto por su altamente potencial como por la personalidad que desprende, muy a pesar de las claras influencias que muestra. Quizás resulte excesiva la comparación, pero que están a la altura de algunos grandes, lo están, y no me quiero ni imaginar hasta dónde pueden llegar si siguen ese rumbo. Me da hasta miedo.
ResponderEliminar¡Un saludo!